¿Por qué queremos ir al Mundial de Fútbol?

Amo competir. Tal vez por eso estudié derecho, para competir en tribunales.

Amo el fragor de la batalla, la adrenalina, la estrategia para vencer al rival, el encuentro, la tensión, el levantarse después de un percance, el remontar una contienda, el momento de frialdad, paz y claridad que hay que tener para vencer al rival y por supuesto los 3 o 4 minutos luego de la contienda en la que has ganado, donde hay una sensación de victoria.

Amo la victoria a través de la alegría del esfuerzo. Sin embargo, he llegado a entender que la herramienta más poderosa que puede tener alguien antes de una contienda es el propósito. Es lo que te levantará cuando te canses y no tengas fuerza, es lo que te hace entrenar hasta el cansancio, es lo que te hace aguantar el sufrimiento y entender los sacrificios. El propósito es la fuerza motora de la victoria, del éxito.

El propósito es la razón por la que luchas, entre más fuerte sea, más grande son las ansias de ganar y más difícil eres de vencer. El propósito no pueden ser cosas banales como el ego, la satisfacción de ganar, el humillar al rival o el dinero. El propósito tiene que ser algo más profundo, tiene que ser algo que en verdad ames, seres queridos o un ideal por el que vale la pena morir.

Recientemente nuestra Selección Nacional de Fútbol ha enfrentado fuertes críticas luego de sus recientes derrotas.

Las críticas vienen porque las personas quieren ganar, pero ¿Por qué quieren ganar? ¿Solo por la satisfacción de la victoria? ¿Por decir que somos mejores? ¿Por el dinero? ¿Por obligación?

En mi opinión las personas de Venezuela tenemos una gran deuda, ya que no tenemos un propósito claro para luchar. Y eso genera críticas por criticar, sin entender qué importancia tiene ir a un mundial. ¿Va aumentar nuestro turismo? ¿Vamos a convertirnos en una mejor marca de país? ¿Vamos a exportar más jugadores? ¿Va a mejorar el nivel de nuestro fútbol? ¿Va a aumentar el producto interno bruto? Nadie analiza esas cuestiones, nadie sabe porque queremos ganar, pero todos queremos ganar ¿y cómo podemos querer ganar si no sabemos para qué sirve ganar? Y si lo sabemos, de que nos sirve que sea un propósito banal como la autosatisfacción. Eso sería el desperdicio de un triunfo.

OVizcarrondo Vinotinto

Cuando era chico una vez, viendo una de las varias derrotas de nuestra Selección Nacional de Venezuela, rompí a llorar. No sé por qué, era algo a lo que estábamos acostumbrados. Pero no puedo negar que cada vez que juega nuestra selección siempre siento una ilusión en el corazón una esperanza a pesar que mi lógica me diga otra cosa. Y pues allí, desconsolado mi mamá se me acercó y me dijo, que debía trabajar y prepararme para que mucho tiempo después si tenía el chance de ayudar, me acordara que en alguna casa en nuestro país, un niño iba a tener la misma ilusión, no podíamos defraudarlo. Yo creo que por eso es que hay que luchar.

Los niños de Venezuela no tienen la culpa de lo que vivimos. No tienen la culpa del mal momento económico que vivimos, de la inseguridad, de la falta de alimentos o de servicios básicos .Ellos no tienen la culpa de nada. Y Sin embargo, ellos son la fuerza latente para crear una Venezuela nueva y diferente. Ellos son la esperanza.

Por esta razón creo que hay que exigirle a nuestra Selección que lo dé todo en la cancha por los niños Venezolanos, por permitirles creer a ellos que todo en esta vida es posible, para demostrarles que si trabajas duro para la victoria ella será tuya, para generarles la esperanza de un futuro mejor, para que no destruyamos su ilusión y en verdad los inspiremos a hacer grandes cosas.

Tengo la seguridad que el fútbol es la clave para crear una mejor Venezuela, porque es una pasión que bien orientada tiene el poder de unir e inspirar a los venezolanos, especialmente a los venezolanos del futuro, nuestros niños.

Es así como la Selección Nacional tiene en sus manos el poder del fútbol, a ellos les pedimos no lo mal gasten úsenlo. Y a los seguidores les pedimos, no critiquemos por criticar, encontremos el propósito y así nuestras críticas no serán vacías o llenas de banalidad, sino que tendrán algo constructivo que dar. Solo así, todos juntos vamos a ganar.

(@AntonioJQR)