CARACAS – En una famosa canción la agrupación venezolana Caramelos de Cianuro decía: “Cuento una a una las estrellas, se que todas ellas, son flores que en el cielo crecen para ti (…)”. Hay un jugador de fútbol que vivió una experiencia similar, claro en su caso no crecieron flores, estamos hablando del defensor Orlando Torres.
Durante la Copa América de 1975, para ser más exacto el 13 de agosto, se enfrentaban Brasil y Venezuela en el estadio Mineirao de Belo Horizonte ante unas 32 mil personas. Ese día, cuando la balanza ya estaba del lado de la verdeamarela, Orlando Torres recibió un codazo en la frente por parte del brasileño Nelinho, que lo dejo tendido en el engramado. Como el mismo nos cuenta: “Hermano. ¡Ese golpe me puso a contar una a una las estrellas!”.
Motivado a ese golpe, el defensor venezolano tuvo que ser atendido por el staff medico criollo. Cuando estaba tendido en el suelo, el doctor del equipo le pregunto: “El Cata Roque manda a preguntar que si quieres que te cambie”. Orlando Torres con todo y que estaba aún aturdido le contesto: “Dile al Cata que yo no viaje en avión por tantas horas para rendirme por un simple codazo”.
A su vuelta al campo, Orlando Torres, le dio a probar a Nelinho un poco de su propria medicina. Después del primer contacto con el zaguero criollo, el jugador brasileño no se acercó en todo lo que restaba de juego a la zona defendida por Torres. Es más, si se acercaba, le pasaba el balón a un compañero para no tener que acercase a la zona donde estaba el vinotinto.
Ese día, nuestra selección nacional perdió con pizarra de 6-0 con goles de Batata (6’ y 79’), Nelinho (8’), un autogol (30’), Campos (53’) y Palinha (65’).
Fioravante De Simone